De niño mucha gente me cuidó ya que mis papás trabajaban todo el día, y ya fueran las muchachas que contrataban, como Cata, Margarita (quien nos pegaba) etc. mis tías Josefina, Maria Elena, Leticia, etc., en algunos casos mi hermana Marthita (Georgina nunca) y una vecina, una muy especial; mi tía Elvira.
Dice mi mamá que yo desde muy niño le comencé a decir ‘Tía’, y así fue durante el tiempo que duramos en esa casa. Muchas veces llegaba yo del colegio y me iba a su casa a esperar en lo que llegaba mi mamá o mi papá. Recuerdo de una vez le rompí un ventanal enorme con un tiro penal que se me fue de chanfle, y así, muchas cosas.
En 1994 salimos de esa casa y perdimos contacto, pero años después, para ser exactos un 5 de enero de 1998, mi hermano Adrián andaba comprando un perro, y en un periódico había un anuncio de que se vendían perritos Boxer, hicimos una cita y fuimos en la noche a la dichosa casa. Pero, ¡oh sorpresa! ¡¿Quién creen que abrió la puerta?!.
‘¡Tía!’ Le grité, nos pasamos y empezó la platicadera entre mi mamá y ella, a contarles lo mucho que pasó en 4 años, en los cuales las dos familias nos cambiamos de casa, falleció mi papá y así, muchas cosas más. Ya ahí el famoso ‘Gin’ (su hijo) nos mostró los perritos, eran como 6, y Adrián escogió al más vivillo, y el único que tenía un collar blanco. El pelo blanco del pecho le formaba un collar muy lindo alrededor del cuello, a quien más tarde sería llamado Bruno.
Los papás de Bruno no dejaban de ladrar, eran unos perros impresionantes, hermosos. Ya ahí nos contaron del abogado alemán que trajo al papá de Bruno, nos mostraron fotos, documentos, y muchas cosas que certificaban lo fino de los perros. Ya no volvimos a saber de ellos.
Y como son las cosas, yo que ayer le estaba diciendo a Adrián ‘Yo jamás volveré a comprar un perro, y si acaso un día compro, o tu compras uno, buscamos a mi tía Elvira para que nos vendan otra cría de la misma familia de Bruno’. Mas tarde me habla mi mamá y platicando me dice ‘¿Quién crees que se murió?’ y yo ni siquiera aún preguntaba quién cuando me dijo ‘Tu tía Elvira, ya hace como 6 meses, de cáncer’.
Anoche le conté a Georgina y se puso bien seria, ella se llevaba muy bien con sus hijas cuando niñas. Descanse en paz mi tía Elvira.
Dice mi mamá que yo desde muy niño le comencé a decir ‘Tía’, y así fue durante el tiempo que duramos en esa casa. Muchas veces llegaba yo del colegio y me iba a su casa a esperar en lo que llegaba mi mamá o mi papá. Recuerdo de una vez le rompí un ventanal enorme con un tiro penal que se me fue de chanfle, y así, muchas cosas.
En 1994 salimos de esa casa y perdimos contacto, pero años después, para ser exactos un 5 de enero de 1998, mi hermano Adrián andaba comprando un perro, y en un periódico había un anuncio de que se vendían perritos Boxer, hicimos una cita y fuimos en la noche a la dichosa casa. Pero, ¡oh sorpresa! ¡¿Quién creen que abrió la puerta?!.
‘¡Tía!’ Le grité, nos pasamos y empezó la platicadera entre mi mamá y ella, a contarles lo mucho que pasó en 4 años, en los cuales las dos familias nos cambiamos de casa, falleció mi papá y así, muchas cosas más. Ya ahí el famoso ‘Gin’ (su hijo) nos mostró los perritos, eran como 6, y Adrián escogió al más vivillo, y el único que tenía un collar blanco. El pelo blanco del pecho le formaba un collar muy lindo alrededor del cuello, a quien más tarde sería llamado Bruno.
Los papás de Bruno no dejaban de ladrar, eran unos perros impresionantes, hermosos. Ya ahí nos contaron del abogado alemán que trajo al papá de Bruno, nos mostraron fotos, documentos, y muchas cosas que certificaban lo fino de los perros. Ya no volvimos a saber de ellos.
Y como son las cosas, yo que ayer le estaba diciendo a Adrián ‘Yo jamás volveré a comprar un perro, y si acaso un día compro, o tu compras uno, buscamos a mi tía Elvira para que nos vendan otra cría de la misma familia de Bruno’. Mas tarde me habla mi mamá y platicando me dice ‘¿Quién crees que se murió?’ y yo ni siquiera aún preguntaba quién cuando me dijo ‘Tu tía Elvira, ya hace como 6 meses, de cáncer’.
Anoche le conté a Georgina y se puso bien seria, ella se llevaba muy bien con sus hijas cuando niñas. Descanse en paz mi tía Elvira.
1 comment:
qe cosas tiene este mundo :S
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